Aunque estés consciente de que no usaste condón algunas veces, nadie espera recibir un diagnóstico de VIH. Cuando sucede, es normal sentir confusión, desorientación o temores. Por ello, aquí te presentamos cinco preguntas que las personas diagnosticadas con VIH se hacen con frecuencia, según la revista Plus.
1. ¿Es posible que haya recibido un falso positivo en mi diagnóstico de VIH?
Cuando te realizas una prueba y ésta resulta reactiva (positiva), lo ideal es ofrecer una prueba confirmatoria, es decir, una segunda prueba para asegurarse de que el VIH está ahí. La probabilidad de dos falsos positivos es extremadamente rara.
Por otro lado, los resultados falsos negativos también pueden ocurrir. Según el portal AIDS.gov, publicado por el gobierno de Estados Unidos, la seroconversión es el momento en el que tu cuerpo comienza a producir los anticuerpos contra el VIH, mismos que se detectan en una prueba. Esto podría suceder en cualquier punto desde dos semanas hasta seis meses después de la infección.
Esto significa que si la prueba de VIH resulta no reactiva (negativa) dentro de los tres meses posteriores a una posible exposición al VIH, es recomendable repetir la prueba tres meses después de esa primera prueba de detección, para verificar que no haya habido seroconversión.
2. ¿Qué cambiará ahora que vivo con VIH?
Con el tratamiento adecuado, vivir con VIH es una condición crónica manejable como lo son el lupus, la diabetes o el asma. Es posible que necesites tener precaución con algunas de tus actividades regulares.
Además, a menos que tengas ya otras condiciones de salud antes del diagnóstico de VIH, es probable que acudas a consulta médica con más frecuencia de lo que lo hacías antes, porque es vital que vigiles de cerca tu salud.
Tu equipo médico te dirá sobre los cambios que debes hacer en tu dieta, régimen de ejercicio y uso de alcohol, medicamentos recetados y drogas recreativas. Asimismo, es posible que te canses más fácilmente, seas más susceptible a infecciones o tengas efectos secundarios a los medicamentos antirretrovirales. Pero sin duda, el cambio más grande en tu rutina diaria será tomar medicamentos.
La medicación para el VIH requiere una adherencia estricta a la dosis diaria prescrita, y los medicamentos a pueden tener efectos secundarios (en su mayoría menores). La comunicación abierta con tu equipo médico asegurará que puedas manejar los cambios en tu vida.
3. ¿Puedo transmitir el VIH a través del sexo oral?
Debido a que el VIH no se puede transmitir a través de la saliva, no puedes transmitir el VIH a tu pareja si le practicas sexo oral.
Si tú eres quien recibe el sexo oral, técnicamente es posible, pero extremadamente raro, transmitir el VIH a través del semen. Es cierto que es una posibilidad biológica, pero incluso si eyaculas en la boca de otra persona, esa persona debe tener heridas abiertas en las membranas mucosas de su boca para que el virus las penetre. Tragar semen o líquido preseminal no es un riesgo porque el ácido estomacal y otras enzimas acaban con el VIH.
Y si eres una persona que tiene vagina, el que alguien te practique sexo oral también conlleva un riesgo extremadamente bajo, especialmente si no estás menstruando y tu pareja no tiene llagas abiertas en su boca.
4. ¿Hay síntomas en los que deba poner atención?
Hay ciertos signos y síntomas a tener en cuenta y algunos factores de salud que deben ser monitoreados constantemente. Según Rose Farnan, RN, y Maithe Enriquez, RN, autoras de Lo que las enfermeras saben sobre el VIH/SIDA, debes prestar atención a síntomas particulares como: diarrea, pérdida de peso o pérdida de apetito, dificultad o dolor al tragar, manchas blancas o llagas en o alrededor de su boca, fiebre persistente, tos nueva, falta de aliento, dolores de cabeza, mareos, visión borrosa o dificultad para recordar cosas.
5. ¿Debo dejar de tener relaciones sexuales tras mi diagnóstico de VIH?
¡No! Los orgasmos te ayudan a dormir, aumentan tus niveles de inmunoglobulina (que combate las infecciones) y reducen el estrés y la depresión. El uso correcto y constante del condón puede protegerte a ti y a tu pareja.
Recuerda que vivir con el VIH es perfectamente posible si sigues el tratamiento antirretroviral, y para ello, debes acercarte a la atención médica cuanto antes. Si tienes un diagnóstico de VIH y no has iniciado tu tratamiento, en AHF Argentina podemos ayudarte. Acude a nuestras oficinas o escríbenos por Whatsapp y haz una cita ya.